Para evitar en lo posible el temido sobrepeso infantil, podemos empezar por una buena educación nutricional o buenos hábitos alimenticios.
Algunas pautas que nos pueden ayudar son:
1. Cremas y purés, los justos.
En torno al año de edad, el bebé tiene que comenzar a masticar comida de textura blanda para que puedan triturarla con las encías.
2. Vigilar el tamaño de las raciones.
Hay que tener en cuenta la edad, altura, el sexo, el esfuerzo físico que realizan, para adecuar los alimentos que toman.
3. Pendientes de la sal.
Al igual que las grasas y los azúcares el exceso de sal esta siendo un problema en la infancia.
4. Cinco comidas al día.
El niño no debe salir de casa sin desayunar ni saltarse la merienda o ir a la cama tomando un vaso de leche.
5. Haz que participe.
Poner la mesa o ir a la compra son tareas que ayudan al pequeño a familiarizarse con productos adecuados y hábitos sanos para la alimentación.
6. También postre.
El postre es el momento apropiado para introducir la fruta. Cuando toque lácteo, mejor optar por los no azucarados.
7. Y para beber, agua.
8. Di no al picoteo.
Aumenta el riesgo de sobrepeso.
9. Variedad, con mucho gusto.
Combinar alimentos, grupos de nutrientes, preparaciones y texturas es una alternativa excelente para no correr riesgo de desarrollar ninguna carencia y una manera de que los niños aprendan que la dieta saludable no tiene por qué ser aburrida.
10. Dar ejemplo.
Un niño sentado al lado de un adulto que come de todo, tendrá muchas posibilidades de adquirir buenos hábitos de comida y no ser selectivo en la elección de alimentos.
Algunas pautas que nos pueden ayudar son:
1. Cremas y purés, los justos.
En torno al año de edad, el bebé tiene que comenzar a masticar comida de textura blanda para que puedan triturarla con las encías.
2. Vigilar el tamaño de las raciones.
Hay que tener en cuenta la edad, altura, el sexo, el esfuerzo físico que realizan, para adecuar los alimentos que toman.
3. Pendientes de la sal.
Al igual que las grasas y los azúcares el exceso de sal esta siendo un problema en la infancia.
4. Cinco comidas al día.
El niño no debe salir de casa sin desayunar ni saltarse la merienda o ir a la cama tomando un vaso de leche.
5. Haz que participe.
Poner la mesa o ir a la compra son tareas que ayudan al pequeño a familiarizarse con productos adecuados y hábitos sanos para la alimentación.
6. También postre.
El postre es el momento apropiado para introducir la fruta. Cuando toque lácteo, mejor optar por los no azucarados.
7. Y para beber, agua.
8. Di no al picoteo.
Aumenta el riesgo de sobrepeso.
9. Variedad, con mucho gusto.
Combinar alimentos, grupos de nutrientes, preparaciones y texturas es una alternativa excelente para no correr riesgo de desarrollar ninguna carencia y una manera de que los niños aprendan que la dieta saludable no tiene por qué ser aburrida.
10. Dar ejemplo.
Un niño sentado al lado de un adulto que come de todo, tendrá muchas posibilidades de adquirir buenos hábitos de comida y no ser selectivo en la elección de alimentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario